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Mi amiga del asado - Parte 2

Luego de ese descubrimiento en el asado con otros amigos. Ella, "Laura", me escribió al día siguiente diciendo que quería seguir probando mi pene de muchas maneras. Esa noche solo fue el inicio de una follamistad..


Por temas de trabajo y obligaciones no pudimos encontrarnos hasta 8 días después, pero durante esa semana las conversaciones por whatsapp fueron muy calientes, muchas fotos, videollamadas y conociendo los gustos el uno del otro.


Quedamos de vernos en su casa en la mañana, quedaría sola por unas horas y era la oportunidad perfecta para cumplir la primera de sus fantasías, tener sexo en la cama de sus padres. Llegué a su puerta, timbré y apenas me abrió me entró, cerró la puerta y se puso de rodillas para mamarmelo como un bombombum. Ella estaba con un babydoll blanco y una lencería de encaje, se veía preciosa, muy follable y era era mi labor empezar a hacerla mojar.


Se quedó chupando mi verga durante casi 10 minutos y varias veces estuvo a punto de hacerme venir, cuando ya sentí que era el momento, la cargue en mis brazos la llevé al cuarto de sus padres, primero la puse boca arriba contra el borde la cama, para tener acceso a su vagina y poder devolverle atenciones. Su clítoris se pronunciaba al correr es tanga de encaje que tenía, ella ya estaba húmeda, mientras me lo chupó también se masturbó y la tenía rosadita, mojada, rica, un manjar para mi lengua, lamia desde abajo hacia arriba, de un lado a otro, me quedaba en su clítoris y lo succionaba suavemente para que ella sintiera, mientras ponía la punta de mi lengua allí y lo estimulaba, se retorcía y me agarraba de la cabeza con fuerza para pegarme más a ella y que no dejara de hacerle mojar.


Unos minutos después sin decirme nada me jalo hacia arriba para poder quitarme el pantalón y que mi verga quedará en toda la entrada de su rico sexo, abrió las piernas, me abrazo y se lo metió con sus piernas enganchadas a mi, estaba tan mojada que se deslizó suavemente hasta el fondo, se sentía muy caliente, nos abrazamos mientras a buen ritmo entraba y salía de ella, jadeaba, gemía y me aruñaba la espalda, haciéndome sentir que la estaba penetrando como a ella le gustaba, me miraba y sus ojos se ponían en blanco, mientras yo concentrado en hacerla venir. Duramos varios minutos así, hasta que me tumbó sobre la cama y se subió a cabalgarme, era hora de ella tomar el control y el ritmo, empezó a mover sus caderas y sus nalgas de tal manera que mis huevos golpeaban contra sus nalgas, sonaba delicioso y se sentía aún más. Sentí como apretó mi pecho con sus manos, me apretaba con sus piernas y empezó a acelerar el movimiento, presentí que se iba a venir, nos concentramos y sus gemidos fueron aumentando, hasta el punto que me dijo, dame tu lechita, la quiero sentir toda dentro de mi, y como sus deseos eran órdenes para mi, así lo hizo, solo que segundos antes de venirme sentí como ella llegaba y me mojaba todo, sentía un calor increíble encima de mi pene y sus jugos me bañaron previo a mi leche dentro de vagina, ambos nos retorcíamos y en medio del éxtasis nos besamos apasionadamente para sellar esa amistad sexual que se venía.


Descansamos por un rato, aprovechamos para desayunar, coquetear, jugar desnudos por su casa, tocarnos, besarnos. Hasta que se puso de espaldas sobre el mesón de la cocina levantando su cola para que yo la consintiera y le pusiera mi pene en medio de las nalgas, jugando y pidiendo que la tocara completa, besos y caricias hasta que mi verga estuvo a punto para volver a entrar en ella. Le gustaba que jugara con su ano mientras la penetraba, con sus pezones, le gusta chuparme el dedo y se dejaba llevar por la situación. De nuevo la llené de leche.


Nos duchamos, nos recostamos un rato y después de una breve siesta de los dos, sentí como me tocaban encima del boxer, fingí estar dormido y su excitación aumento hasta sacarlo y empezar una mamada, me dio la espalda y en cucharita me arrimo todo su lindo y bien proporcionado culito para meterselo, cuando se puso así la agarre de sus tetas y le hice sentir que ya estaba despierto y listo para un tercer round. Cambiamos un par de poses, en 4, contra la pared, probone, de nuevo ella encima de frente de espaldas (una de mis favoritas) hasta que le dije que ya estaba a punto de descargarme de nuevo, y me pidió la leche en su boca, como negarme, se la di completa y ella muy juiciosa se la comió con ganas, diciéndome que sabía dulcesita. Pasamos el resto de la mañana viendo películas, almorzamos, nos echamos un rapidin para finalizar la jornada y me fui.


No pasaron ni dos horas cuando ya me estaba enviando fotos sexys buscando mi respuesta para una sesión más. Nos vimos más de 20 veces antes que ella se mudara por un par de años de ciudad mientras hacía su maestría.


Entre esas ocasiones aún quedan un par de anécdotas más sabrosas para otras partes en estos relatos.


Mientras que solo queda encontrar otra buena amiga en Bogotá para compartir momentos únicos, si eres esa chica que quiere probar cosas nuevas o salir de la rutina, escríbeme, no importa que seas casada, separada, soltera o lo que sea.


Pronto parte 3.



manuelcel

Soy hombre heterosexual

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Categoria: Hetero: General
Fecha de Publicación: 2024-04-28 01:30:58
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